En ruta hacia Yosemite | Valle Fértil + Mariposa Old Town

El paisaje de las rutas californianas es sumamente atractivo. Paisajes que cambian constantemente de color, entre el verde y el amarillo, pueblos ricos en historia... y en algunas zonas, cultivos por doquier.
Como les contaba en el post presentación de este roadtrip por California (ver Dossier de Viaje), nuestro plan de ruta original era hacer Las Vegas - San Francisco, previo paso por Yosemite. Pero el partido de la selección argentina de fútbol por la Copa América disputado en Santa Clara, ameritó alterar el itinerario y hacer la ruta este-oeste y la inversa.
En este contexto, pudimos comprobar que la geografía de California es muy diversa: montañas alpinas, costas nubladas, desiertos calurosos, y un fértil valle central.

Partiendo de la costa oeste, llegar a la zona de Yosemite es algo complicado. Y es que no hay una buena carretera que te lleve directamente a la entrada del parque.  Lo ideal es llegar desde San Francisco vía Manteca o bien desde Los Angeles vía Fresno.
De todas maneras, atravesar el estado de California de oeste a este nos resultó encantador.  Y es que allí descubrimos cuán fértiles son las praderas californianas. Grandes extensiones de cultivos agrícolas, plantaciones de uva, ajo, cítricos, frutillas, duraznos, cereza y frutos secos (nogales, pistachos y almendros).

El centro de California ofrece una de las experiencias más ricas en todos los sentidos: la oportunidad de conocer - y degustar - las bondades que ofrece esta tierra. Por la ruta pordemos encontrar un sinfín de puestos agrícolas rebosantes de productos frescos. Nada mejor entonces que hacer un stop y hacerse de unas frutas recién recolectadas.

El trayecto hacia la alta montaña va cambiando a medida que avanza. Nuevamente vuelven a aparecer las praderas amarillentas y los paisajes con escasez de árboles.

Tras un recorrido encantador, al anochecer, llegamos a la localidad donde nos alojaríamos: Mariposa. Habíamos descubierto este lugar en nuestro roadtrip, allá por 2001. Y todo sigue igual... sus 200 metros de centro, su popular restaurante, sus tiendas de souveniers... y ningún semáforo.

Alojarse en Mariposa es un acierto para los que quieren hacer una visita relámpago a Yosemite. Claro que el parque nacional brinda la posibilidad de alojarse dentro, con diferentes comodidades y todas las opciones en cuanto a tarifas; pero eso es otra historia.
Si el plan es pasar 3 o 4 días (o más) inmersos en plena naturaleza para descubrir todos los rincones del Yosemite, dormir dentro del parque es la opción ideal. Pero si la idea es recorrer los sitios más emblemáticos del parque, basta con pasar un par de noches en los pueblitos de los alrededores.
Y nosotros optamos Mariposa, por su encanto y su cercanía a la zona más espectacular de Yosemite. El Comfort Inn Yosemite Valley Gateway fue nuestro elegido.

Comfort Inn Yosemite Valley Gateway 

Algunas imágenes del pueblo  >>

Mariposa tiene ese encanto particular de los pueblitos de época, ese 'no se qué' que hace sentir a los visitantes que "todos son bienvenidos".

Bonus track >> ¿Dónde comer en Mariposa?

Pizza Factory es el lugar más popular de esta pequeña localidad. Allí sirven pizza y pasta todos los días (almuerzos y cenas).  Un lugar pintoresco, con mesas comunales y excelente propuesta gastronómica (en relación a calidad y precio). 

"No bully zone"

 Este post forma parte del Dossier de Viaje #adorableCalifornia. Si no has visitado aún los posteos anteriores, te invito a que hagas click >> Las Vegas, asombrosa (parte I), Las Vegas, asombrosa (parte II).

Por lo pronto, la historia sigue... así que no te pierdas el paseo por el Yosemite National Park en el próximo post. Saludos :)

Sil